Este bolso se lo hice a mi hermana para su cumpleaños, con todo mi cariño y pensando que le iba a gustar.
Pero es que las chicas de mi familia somos un poco especiales. Bueno, yo no, yo soy muy normal. Las especiales son mi madre, mi hermana y mi hija. Es dificilísimo que les hagas un regalo y les guste.
No le he visto usarlo, pero igual es que no quiere estropearlo.
Esto me recuerda, un día de Reyes, ella era muy pequeña, y mi hermano le "encargó a los Reyes Magos" un costurero para la niña (ella es la menor). Abrió todos los regalos, empezó a jugar con ellos, y mi hermano estaba triste porque la observaba y no tocaba el costurero.
Ya harto de esperar, va y le dice "no jueges tanto con él que se te va a estropear". Todavía al recordarlo no puedo parar de reír.
Por cierto, mi hermana es alérgica a la costura (quizá este regalo es el culpable de su trauma) y mi hermano, para una vez que no hace un regalo boomerang -en su adolescencia y más mayorcito, siempre te regalaba algo que le podía ser útil: por ejemplo una cantimplora cuando estaba próxima una excursión, pero suya, no tuya.
En fin, que yo creo que mi hermana no usa el bolso para que no se le estropee.
Y yo sigo coso que te coso...
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