Encuentro con Lola

Como no hay dos sin tres, el tercer encuentro en menos de una semana ha sido con Lola de Laboreando voy.

¿Qué queréis que os diga de Lola? Que me encanta, que es una compañera de viaje estupenda, que nos entendemos estupendamente, que nos lo pasamos genial cada vez que nos vemos.

Como el encuentro fue ayer, se me adelantó, y me emocionó con su post.

Teníamos cuentas pendientes y no le iba a dar el dinero en la mano, por eso pensé que iría mejor en una bolsita y aquí os la enseño:

Por supuesto que le bordé el nombre con los hilos que ella me regaló de "la abuela Dolores".

Y es que con estos hilos, se bordan las letras solas.

Un poquito de folclore para el forro:

Y, ahora, ella dice que yo soy generosa, no, LA GENEROSA ES ELLA, fijaos que bloque me regaló:

Compuesto de cuatro log cabin divinos de la muerte, hechos de forma impecable, que ya sé el uso que le voy a dar, pero eso será sorpresa.
Mide 35 x 35 cm.

Y, por si fuera poco, unas telitas:

Las castañas no, esas son de atrezzo, las recojo del bosque en mis paseos matutinos.

Bueno, el objetivo era hacernos un bloquecito de DJ juntas que hasta ahora no lo habíamos probado, pendiente queda amiga Lola, nos distrajimos con su maquinita de coser haciendo bordaditos.

Si queréis verlos mejor, tendréis que dar click en ampliar imagen.

Parecíamos dos niñas pequeñas probando un juguete de Reyes.

Bueno, es que a mi me la mandan sus Majestades los Reyes Magos de los EEUU y como está en camino quería probarla.

Muchas gracias Lola, me he divertido de lo lindo, espero que tú también.

Y, ahora cuidadín, que le he cogido el gusto a pasearme por las casas de las blogueras, no os vayais a dejar la puerta de casa abierta y me cuele.

En la mía ya he dejado una foto tamaño poster para que no me echen de menos.

Mi Jc está encantado, tanto que hasta me ha sorprendido con un regalito cuando he llegado, creo que le gusta "compartirme" para no llevar él toda la carga.

Lola, tenemos que hacer un bloque juntas, dificultad media para que mi nivel no se note en demasía.

Todavía estoy sonriendo y esto, amigos, no tiene precio.

Lola, otra vez gracias, volveré porque hasta tu cafetera -que te ha salido tan lista- sabe como me gusta el café y Luna (tu gata) me saluda educadamente cada vez que paso a su lado.

Y sigo coso que te coso...