Foulard cuelga bolso

¿No os pasa que cada vez que comemos en un restaurante nos estorba el bolso?

Ya sabéis que lo de dejarlo en el suelo no vale, que se nos va el dinero (aunque no tengamos).

La semana pasada, comiendo con unas amigas, probé a enganchar el bolso a la silla con un bolígrafo y el invento fue regular....

Ayer, que tenía otra comida, ya pensé en casa (poco, ya sabéis que más de dos minutos de concentración me causa jaqueca), y cogí un foulard, por supuesto, a tono con el bolso.

Pues bien, la cosa es sencilla, sacas discretamente el foulard (bueno, yo discreta, lo que se dice discreta no soy, menudas risas nos pasamos en la Convención a cuenta de mi foulard), y le haces un lazo -también discreto- a la silla.

Para la siguiente kedada con amigas, pienso sorprenderlas llevando varios foulares (de diferentes colores para que a ellas también les combine) y las primeras risas ya las tenemos aseguradas.

Porque mis amigas, son muy buenas amigas, pero "no me hacen los deberes" , pasan de leer el blog, y eso que dicen que les encanta. Menos mal, porque si no les gustara...

Siempre la misma excusa del tiempo, pero ya sabéis yo lo que pienso de eso. El tiempo lo gestionas tú para las cosas que consideras importantes. No digo más.

Y sigo coso que te coso...